Microentrada actual

Cambio en criterio de los juegos flash del mes.
16/03/2024

Tenía una vieja norma de no reseñar juegos flash de varias partes en mis entradas de juegos flash del mes.

Pero en vista que eso me ha llevado a que varios juegos flash que me encantan aun no han sido reseñados en todos estos años y falta de recámara, voy a abolir esa norma comenzando con este mes.


Más microentradas

Microentradas antiguas

jueves, 13 de agosto de 2015

La conspiración de los refrescos

¿A quién no le ha pasado antes? Estar sediento, por el calor de 35º de media, por la caminata que te has pegado del centro a la periferia a ver si lograbas encontrar lo que buscabas, la carrera para lograr pillar el metro o autobús de turno y no tener que malgastar 10 minutos de tu vida inútilmente en la espera del siguiente, o simplemente porque llevas desde las 8 sin meterle ningún tipo de líquido al cuerpo y ahora son las 3. Pensar en cómo poder refrigerante por dentro. Pensar en tomarte algo bien fresquito. Pensar en un refresco, así, recién salido de la nevera o cámara frigorífica, bien fresquito, para calmar la sed...




Mmmmm qué ricos...

Bueno, en ese momento, ¡está decido! Te diriges al bar, puesto de calle o chino más cercano a reclamar tu preciado refresco por el módico precio arbitrario de entre 1 y 2 euros y medio (según el gusto del dueño).

Coges el refresco, lo abres, y empiezas a beberlo, esperando calmar la sed. Uno, dos, tres tragos y parece que ya está hecho. Pero a los 2 minutos como mucho, otra vez viene esa odiosa sensación a atormentarte. Bueno, un trago más. Y vuelve a pasar lo mismo. Venga, otro trago. Y otro más. Y te vuelve a rascar la garganta la sed. O, bueno, otro par de tragos. Pero regresa al minuto. *Sigh*, está bien, otro más. Parece que estabas más deshidratado de lo que pensabas. Otro más. Vuelve la sed. Otro m... ¡¿A DÓNDE COÑO SE HA IDO MI REFRESCO?!

Se marchó volando, como esta palomita.

Pues eso, que se ha acabado. Y tú con la misma sed que antes. Solo que con 3 diferencias: en tu monedero faltan las monedas justas del precio del refresco, tienes el sabor del mismo impregnando toda tu boca, y estás dudando entre si dejarlo estar y pasar sed, o pillarte otro.

Antes de que la sed realmente acabe contigo...

Comprarte otro puede parecer la opción más tentadora, si no fuera porque como a (casi) cualquier hijo de vecino, cuándo uno lleva más de 2 refrescos de seguido, está más que saturado de tanto producto y tanto azúcar aguado. Y si ese fuera el único problema, todavía valdría, pero es que no: por la sed no te enterarás (ya que se mantiene) pero por las ganas de mear, sí que sabrás cuánto te has pasado bebiendo.

Así, que tus colegas no se den cuenta de tu precaria situación.

Y ahora tienes 2 opciones, entre las que tienes que elegir rápido mientras bailas el casachó en un intento desesperado de montar el gran lago en el mismo sitio en el que te encuentres. Una es entrar a un lugar con baño (un bar, un mercado, tu casa, la casa del amigo, la de la vecina del quinto, ¡todo vale en un apuro!), o soltar la carga en todo el suelo. La segunda opción, la de los cerdos y los marranos, es la favorita de muchos tíos, ya que claro, como solo hay que sacar el miembro, con ocultarse un poco detrás de un arbusto o una farola, o incluso simplemente ponerse de espaldas ya les vale. Que sí, que les estará viento todo el mundo y dios mundo, pero a ellos les da igual, se creen bien ocultaditos a las miradas del público.

Tú tranquilo,
que no se te ve nada, pero nada-nada

Más problemas los tienen las tías, por el hecho de que tienen que dejar todo el culo al aire para evacuar, y todo eso. A no ser que estemos hablando de una pasada de rosca a la que todo le da igual, intentará buscar un lugar mucho más oculto de miradas indiscretas, para evitar miradas, palabras, silbidos, y algún que otro vídeo a Youtube o foto a Cuánto Cabrón como extra, algo que puede pasar con un 50% de probabilidades, según las últimas estadísticas.

Tú solo cambia a la leona por un menda con móvil a punto.

Sin embargo, como tengas la regla, mejor que la segunda opción ni la intentes. No solo porque se da todavía más espectáculo y lo dejas todo todavía más pringando, sino porque además el riesgo de acabar en las redes se multiplica. En ese momento, depende única y exclusivamente de la probabilidad de que aparezca alguien que no tenga el móvil sin una gota de batería, y que además no le de corte sacarte el vídeo/la foto mientras tú le estás mirando fijamente.

Y mientras dejas el suelo así de mono.

Y todo esto, por supuesto, con una sed de caballo, no nos olvidemos de la premisa inicial y principal. Con una sed de caballo, aun habiendo tragado más líquido que una alcantarilla limpia un día de mucha lluvia.

¿Y cómo es posible esto? se preguntarán muchos.

Muy sencillo, por el mismo motivo que el agua de mar no quita tampoco la sed: la relación entre soluto y disolvente es demasiado alta, lo que significa que hay demasiado soluto disuelto en el líquido, con lo cual la concentración de solutos en la sangre se mantiene. Para los dummies: tiene demasiado azúcar.

A Azúcar le gusta esto.
No, tranquilos, no espero que nadie pille la referencia, pero bueno.
Me hacía ilusión.

Vale, ok, ¿y por qué las empresas querrían hacer una bebida refrescante que, en vez de quitarte la sed, te la diera? ¿Qué ganan con eso?

Bueno, ahí... creo que te puede responder perfectamente tu monedero. ¿Cuántos refrescos pueden caer de esa forma en una tarde cuándo solo debería haber caído uno? ¿Dos? ¿Tres, cuatro quizá?


Tras toda esta aventura, decides probar aquello que habías dejado como opción descartada, cómo último término, como la elección a la desesperada, aquella de "solo hacer si todo lo anterior falla".

Y ese es el momento en que te acercas a una máquina expendedora, un chino, un bar o lo que te pille más cerca, y pides una botella de agua pequeña. La abres, empiezas a beber y... media botella, y la sed ha desaparecido. Y pasa un minuto, y no vuelve. Y pasan 5, y tampoco. Al final, la opción más rápida y más barata resultó ser esa que habías dejado apartada porque ¡el agua, por favor! ¡Qué insulsa! ¡Eso, para los animales! (Como si nosotros no lo fuéramos). Y, al final ¿qué? ¿Qué es lo que te ha quitado esa sed que incluso hacía que te entrasen ganas de roer las piedras a ver si se desvanecía?

Cómo te crees que te ves.

Para salir de juerga, de bares, o de lo que se quiera, todo lo demás está genial. Ahora bien, para matar la sed, el agua corriente es medalla de platino.

¡AGUA, HE DICHO AGUA, NO WHISKEI!
¡DEJA DE CORROMPERME AL PÚBLICO!

¿Entendéis ahora por qué cada vez se ven menos fuentes funcionales por las ciudades?

7 comentarios:

  1. Bufffffff, muyyy de acuerdo con esta entrada, y todo muy cierto. No bebo otra cosa que agua, pero cuando me da por ahí (un día de verano en el que beba fanta), la cosa es un fracaso y acabo bebiendo el doble de agua para compensarlo.

    Porque yo bebo agua como un camello. Cuando tengo sed me compro un litro y medio de agua y aún así, tras bebérmela, me suele faltar un nosequé (más agua), aunque me quedo bastante bien. El granizado también me calma mucho la sed, pero claro, es un zumo en el fondo, y no es lo mismo que una bebida azucarada de marcas famosas. Lo de mear en público, bueno, sí que lo he visto a muchos tíos y en sitios tan transitados como un árbol en plena plaza catalunya a las 12 del mediodía, cosas que tiene la gente. En realidad cuando los veo pienso: "qué envidia, y yo buscando un MCDonald's mugriento en el que no me cobren por entrar a mear". La vida es bella para los hombres.

    ¿Sabes si hay algún motivo por el cual el agua fría NO me calme la sed? ¿Soy solo yo que soy un extraterrestre? Sabía que venía de otro planeta, pero quiero saber si es una de mis peculiaridades o hay un motivo real XDDDDDD.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, es que el granizado no deja de ser hielo en su mayor parte, con un poquito de azúcar para darle el color y el sabor justo. Aun así, hay a veces que también se pasan con lo que le meten.
      Yo suelo ver a tíos evacuando en plena calle por la noche. Y lo que suelo pensar en ese momento es "qué pena de avispa". Sí, soy un encanto, lo sé XDD.

      Por lo que tengo entendido, el agua caliente calma mucho más la sed que la fría, pero eso de que la fría no calme nada la sed es nuevo para mí. Lo único que sé es que, en mi caso, tanto el agua muy fría como muy caliente, no aguanto más de 2 tragos, y no me quitan la sed para nada.

      Eliminar
  2. Muy buena la entrada. Entre las verdades como templos que has soltado y ese toque humorístico es inevitable que guste. Gran trabajo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, me alegro que te haya gustado ^_^
      La verdad, es que ya necesitaba dejar un poco tanto análisis de videojuegos y escribir algo dónde me soltase un poco más.

      Eliminar
  3. Mis retinas podrían contar el caso de un conocido mio que por comida se bebe 6 colas (ey, colas, a lo genérico, no metamos aquí un comentario con esponsor a ninguna marca mundial conocida) es cierto que hace años me enteré de ésta relación fisiológica y le pregunté, al parecer no bebe apenas agua, pero los refrescos en su casa son más importantes que la fruta y la verdura.

    Sinceramente no me gustaría contar las latas que terminan cayendo a su costa a lo largo del día...
    ...¿QUE COJONCIOS?¿ASÍ QUE LO DE QUE LAS FUENTES DE MI BARRIO ESTÉN PUTO ATASCADAS DESDE LOS 90 ERAN PATRAÑAS CON CONSPIRACIÓN? LO DIJE! HAHAHAHAHAHA LO DIJEEEEEE!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo tenía a una tía y su hija que ambas bebían 2 litros diarios de Coca Cola cada una, así que tranquilo, que me lo creo. Al parecer es porque muchos de estos refrescos causan una adicción importante debido a la cafeína que llevan.

      Cualquier conspiración cuyo resultado sea sacarnos los cuartos es cierta ;D.

      Eliminar
  4. No se puede gastar dinero público en bancos pero si e fuentes con agua para que la niña no se gaste un euro en una botella de agua (o llévatela de casa) y luego tener para diversa mierda como juegos. En fin.
    Por cierto, gracias por levantarte un día y abrirte el blog, si no nadie jamás hubiese sabido que con el agua se te calma la sed mejor que con un refresco. Gracias por haber estudiado y contárnoslo a los pobres indultos. Gracias.

    ResponderEliminar